LAS BRASAS

Singularmente, no se podría estar seleccionando varios lugares a la vez, para describir por cuál visitar.  Lo cierto es que, muchos son los llamados y pocos los escogidos, por lo que donde está la acción hay que llegar, aún sin invitación. Hasta me salio en versos.  Bueno, esta vez, una amiga me dijo que los miércoles en el camino de oriente, propiamente en Las Brasas, se había inagurado las noches de karaoke, así que mi instinto canino, me indicó que debía asistir y ver por mis propios ojos y oler por mi propio olfato a que se refería.

    Eran las ocho de la noche, y muy cerca de los sanitarios para varones, un señor con una consola y una laptop, se preparaba para anunciar el inicio de la velada, sin embargo, para sorpresa, fue una damita quien hizo los honores, informando que el Karaoke, se rompía una vez más, y seguidamente abrió con una bella tonada de una melodía estadounidense, es decir, que también hablaba inglés.  Esto es un tipo diferente de hacer una actividad de Karaoke, lo que se puede llamar el Karaoke Movil, donde el negocio sub contrata a una empresa o como en este caso, a una pareja familiar, pues me enteré que son hermanos, y son quienes amenizan la velada.

      Es una lástima que quienes desean cantar no aprovechen la oportunidad, pues, hasta las once de la noche, que es el término final de la presentación, se contaron con unas cinco personas quienes se atrevieron a desfilar frente al microfono en el improvisado escenario.  Lo bueno es que había de todo un poco, y el lugar mantiene un cierto lleno en las mesas.   Nuevamente, aún al aire libre en que se encuentra el restaurante (aunque tienen un sector cerrado con aire acondicionado), no falta quien fuma como chimenea.  Es un gran problema entre juventud y los adultos.   

      La dinámica es muy sencilla, se solicita la canción al Dj, quien la programa, si es que la tiene, si no se aprovecha de una unidad USB,  hoy conocido como modem 3g, para acceder a internet y buscar la melodía.  Es decir, se hace el propio.  Luego, simplemente de pie, o sentado en una silla que facilitan, le da carta abierta a sus sentimientos y vocación de disque cantante.   El sonido es muy bueno por ser un lugar abierto, y dos parlantes cuya sonoridad es redundante, guau, guau.

      En este caso, se debe medir la disposición de Las Brasas, en brindar a su clientela algo alterno, a los servicios de bebidas y comidas.  Los saloneros están presto a ayudar más con esto último que con el karaoke, en vista que la pareja es quienes visitan mesa a mesa, a los parroquianos a invitarlos a que se les una en la actividad. Algo así como "por favor, canten o si no ya no nos contratan" pero con un poco más de dignidad y belleza, pero con pocos resultados.  Hay que esperar a que el alcohol llegue un poco más a la celula de la valentía o de las ganas.

        Por tratarse de una alternativa u opción, el puntaje es de un 8, pues va hacia el empresario que busca otorgar algo diferente, y bien se apunta si hay espacio para divertirse, pero habra que esperar que ocurre cuando se llene y nadie pueda cantar o como la pareja se la jugara para mantener el Karaoke en Las Brasas.